Si Kurt Cobain pudiera echar una mirada al presente, y ver todo lo que ha significado, significa y significará en la música, pensaría: “ ¡Madre mía, la que hubiera llegado a montar si hubiera vivido unos años más!”
A sus jovencísimos 27 años perdió la vida. Un acto demasiado meditado según su carta de suicidio, o tal vez no tan meditado, quién sabe. Pero algo es seguro: que revolucionó el panorama del rock mundial, creó un nuevo estilo (el grunge) y para colmo, y por si fuera poco, construyó una leyenda que perdurará por mucho, mucho tiempo.
El día de su muerte, el 5 de abril de 1994, Dylan Carlson, le concedió la escopeta con la que se quitaría la vida.
“Ya hace demasiado tiempo que no me emociono ni escuchando ni creando música”, decía, pero es que su música sí emocionaba a su público. El mismo día que perdió la vida, unas casi siete decenas de jóvenes se suicidaron de la misma manera que él, y solo para “imitarlo”. Así que haceros a la idea de lo que era capaz de influir el rubio rebelde por excelencia de la década de los noventa.
En el vigésimo aniversario de su muerte,
Nirvana ha entrado en el Rock Hall of Fame, numerosos grupos le han rendido tributo para recordar a su líder, los medios de comunicación musicales no han parado de dedicarle reportajes, especiales, y nosotros no íbamos a ser menos. Kurt, el genio de la música, que maravilló a toda una generación, merece un escrito y un repaso a su vida, así que allá vamos:
Nacido un 20 de febrero de 1967 en la americana ciudad de Seattle. Con tan solo dos años, ya recuerdan sus familiares al joven en el salón de su casa intentando cantar, para otros dos años más tarde, tocar el piano con voz a la misma vez.
El característico zurdo, creció entre canciones de los Ramones y los Beatles hasta llegar con noveno año de vida a la separación de sus padres. Según ellos, marcaría demasiado su infancia, llegando a despertarle un odio en el que no mostró amor alguno hacia estos.
Fue acosado constantemente en la escuela por los demás compañeros de clase por ser amigo de un chico gay. Pero aun así, consiguió un grupito donde tocaría la batería durante seis años.
Su tío Chuck le regaló con 14 una guitarra con la que comenzaría a escribir canciones. En los años siguientes conoció a Novoselic, y con el que pudo sacar a la luz su primera maqueta con una banda que bautizaron como Fecal Matter.
En cuanto a su batería, rotó constantemente, hasta dar con el archiconocido Dave Grohl (actual líder de Foo Figther) y conseguir reunir a los componentes que formarían la base de Nirvana. Tras mucho esfuerzo consiguieron que por fin una discográfica no independiente les sacara a la venta su segundo disco de estudio tras Bleach (1989): Nervermind en 1991. El resultado fue traducido en un triple disco de platino en EEUU.
Entre este disco, y el que vendría al año siguiente, su amor por Courtney Love fue afianzándose hasta el punto de hacer público el embarazo de su mujer y su matrimonio más tarde.
In Utero fue el tercer disco de los chicos, donde debido a la censura, se vieron obligados a cambiar nombres de sencillos como Rape me por Waif me.
Masas de público, y números uno por todo el mundo. Nirvana se convertía en uno de los grupos más famosos del planeta. Pero algo truncó la meteórica carrera de este grupo:
Sus constantes problemas de salud eran paliados por su adicción y consumición de drogas. Su dependencia era tal que le llevó a extremos insospechados (mareos, enfermedades, perdidas de conocimiento…). Love hizo lo que pudo mediante rehabilitaciones, reuniones con sus amigos para auto concienciarle, etc… demasiado era ya.
Los últimos días de su vida intentó suicidarse en varias ocasiones, hasta el punto de desaparecer durante unos días por Seattle.
Fue hallado muerto el día 8 en una habitación superior del garaje de su casa, junto a una escopeta y una carta.