11 del 2014

1. She Sir – Mania Mantle

Go Guitars (2014, Shelflife), el disco debut de She Sir, cumple con el disco Shoegaze estrictamente clónico del año. No hay nada demasiado interesante más allá de ‘Mania Mantle’ —esplendoroso desarrollo final—, canción poco original y de patrones bien conocidos que, sin embargo, se ejecuta a la perfección. She Sir, al igual que otros tantos grupos semejantes a ellos, sólo aciertan a dar a la tecla adecuada una vez. Jugar con el revival es difícil.

2. Avey Tare’s Slasher Flicks – Little Fang

Avey Tare’s Slasher Flicks es la nueva aventura en la que se ha embarcado Avey Tare, miembro de Animal Collective, esta vez acompañado por Angel Deradoorian, de Dirty Projectors, y Jeremy Hyman, de Ponytail. Enter the Slasher House (2014, Domino) es, cómo decirlo, un conjunto de ideas difusas, donde la huella de Tare sólo brilla con luz propia en Little Fang, que es puro Animal Collective pasados por la balada ochentera, al estilo de Ariel Pink —te echamos de menos—.

3. Angel Olsen – Forgiven/Forgotten

Mi opinión sobre Burn Your Fire For No Witnesses (2014, Jagjaguwar), el segundo disco de Angel Olsen, es sustancialmente menos entusiasta que la vertida por Dr. Chou en su reseña. Creo que Olsen pierde muchísimo fuelle en la segunda mitad del disco, cuando se convierte en una cantautora más de guitarra y melancolía. Aquí, en ‘Forgiven/Forgotten’, entre electricidad y ruido sordo, supera en varios metros y kilómetros al tan alabado álbum de Torres el año pasado.

4. Water Liars – I Want Blood

Compitiendo en la liga de The Walkmen y The National, Water Liars ofrecen en Water Liars (2014, Fat Possum), su tercer trabajo, una de cal y una de arena. En cada canción. De ejemplos como la elegantísima y muy sentida ‘I Want Blood’ pasan al habitual defecto de las dos bandas citadas más arriba: los medios tiempos para la edad adulta que son tan emocionalmente difusos como planos. Con todo, amantes del Pop Maduro, deberíais dar una oportunidad a Water Liars.

5. Eagulls – Possessed

¡Post-punk! ¡Sí! ¡Más! Eagulls despertaron exactamente esos tres conceptos en mi cabeza hace un par de meses cuando nuestro proveedor oficial de grupos revival random del género, Ferraia, nos los descubrió. Los cruficiqué a la primera escucha y, a la segunda, creí haber visto reminiscencias deHolograms en ‘Possessed’ y, en general, en la recta final de Eagulls (2014, Partisan). Más ruidosos, les sienta mejor la euforia que el tenebrismo. Y, eso sí, mucho mejores que Iceage.

6. Hospitality – Rockets and Jets

Ya hablamos del segundo disco de Hospitality tiempo atrás, contrastando las sensaciones agridulces que ofrece en proporción a su cada día más delicioso debut, uno de esos discos. Amber Papini se ha querido arrimar al hombro del Dream Pop de atmósferas un tanto oscuras y guitarras cristalinas, contraste que, a excepción de aquel disco de Deerhunter, no ha deparado sino tragedias. Trouble (2014, Merge) no se hunde por canciones como ‘Rockets and Jets’, pero es un gran “pero”.

7. Real Estate – Talking Backwards

Lo mismo podemos decir de Real Estate. Ellos venían de una cima más alta que Hospitality, Days(2012, Domino), un disco de abrumadora paz. A lomos de las mismas melodías de psicodelia amable y guitarras entrelazadas, Atlas (2014, Domino) parece haberse sumergido en discos tan flojos como el último de Ducktails o el de Alex Freeker en solitario. Mal, decepcionantes Real Estate a pesar de recuperar su mejor versión en ‘Talking Backwards’ y el verano que todos querríamos, podemos vivir.

8. Pontiak – Wildfires

Pontiak estuvieron muy cerca de entrar en nuestra lista de los mejores discos de 2012 con Echo Ono (2012, Thrill Jockey). Dos años después Innocence (2014, Thrill Jockey) nos ha dejado más sinsabores que alegrías. Paradójicamente, donde Pontiak salvan los muebles, y de qué manera, es cuando agarran la guitarra acústica y la letanía del amor perdido o del enamorado perdedor.‘Wildfires’ está lejos de su dominante sonido Stoner, pero es su momento más inspirado.

9. The Horrors – I See You

El adelanto de Luminous (2014, XL) puso el nivel tan, tan alto, que fácilmente podría ser la mejor canción de este año y parte del anterior. ‘I See You’ es la cima de The Horrors: si llegan más alto se han pasado el revivel Krautrock. Por fortuna o por desgracia para ellos, el resto del disco navega entre canciones que son un “sí pero”, un “bueeeeno” y un “que llegue ya ‘I See You’, por Dios”. Naturalmente que no es un mal disco: sólo un disco lejos, muy lejos de su mejor canción.

10. Total Control – Expensive Dog

Aún no hemos hablado del nuevo disco de Total Control, el segundo en su carrera tras aquel fabuloso debut titulado del mismo modo, pero lo haremos esta misma semana. De momento, hablemos de ‘Expensive Dog’, la canción que mejor les une a su anterior trabajo y que está un peldaño por encima del aire más ligero y menos interesante de Typical System (2014, Iron Lung). Garage y Post, ambos conceptos unidos al más importante de todos: Punk. Puro Total Control.

11. Dean Wareham – I Can Only Give My All