Conocida por la cerveza y el chocolate, Bruselas es una de las capitales europeas más originales y cosmopolitas. Centro de negocios por excelencia, la capital belga cuenta con una arquitectura y cultura que deja boquiabiertos a los que se acercan a disfrutar de su encanto. Luz, color y vitalidad hacen de Bruselas una ciudad llena de propuestas diferentes para que el viaje sea una experiencia única. Si os animáis a visitarla y tenéis poco tiempo aquí os contamos qué hacer en un día en Bruselas. ¡Preparad las maletas!
POR LA MAÑANA
Amanece en Bruselas y vuestra primera parada no puede ser otra que las Galerías Reales Saint Hubert. Construidas entre 1820 y 1880, Saint Hubert fueron las primeras galerías comerciales de Europa. Elegantes y distinguidas, están cubiertas por una enorme cristalera y se dividen en tres zonas: La Galería de la Reina, la Galería del Rey y la Galería de los Príncipes. Dentro encontraréis un sinfín de tiendas de las mejores marcas, restaurantes, joyerías, chocolaterías e incluso un cine y un teatro. Lujo y elegancia en los aproximadamente 200 m. que miden estas galerías a las que se puede acceder desde la Rue du Marché aux Herbes, la Rue des Bouchers o desde la Rue de l´Ecuyer.
Las galerías Saint Hubert están situadas muy cerca de la Grand Place, símbolo por excelencia de la ciudad, por lo que prácticamente sin daros cuenta llegaréis al corazón de Bruselas.
A lo largo y ancho de la plaza podréis encontrar diferentes casas gremiales del siglo XVII denominadas Maisons des Ducs de Brabant, el Ayuntamiento de Bruselas, que es la construcción más antigua e importante de la plaza, Le Pigeon, donde se alojó el escritor francés Victor Hugo durante su exilio a Bélgica o la Maison du Roi, residencia durante muchos años de los monarcas reinantes y a día de hoy Museo de la Ciudad. A la izquierda del ayuntamiento se encuentra también la estatua de Everad´t Serclaes, ciudadano famoso por liberar la ciudad de Bruselas en el siglo XIV. Se cree que tocar el brazo a la estatua da buena suerte o la posibilidad de regresar a Bruselas, así que ya sabéis ¡no os vayáis sin probar fortuna!
Si queréis hacer un pequeño parón para descansar podéis sentaros en alguna de sus terrazas a disfrutar de una cerveza mientras contempláis la riqueza arquitectónica de la Grand Place. O si sois más exquisitos en el bar más famoso de la Grand Place, el Le Roy d´Espagne con unas vistas excepcionales a toda la plaza. Desde luego merece la pena detenerse a disfrutar de uno de los lugares más concurridos de la ciudad.
Por si no lo sabíais Bruselas cuenta con ¡más de 600 tipos de cerveza! así que no os será difícil encontrar alguna de vuestro agrado. De mantequilla, chocolate, frambuesa o cereza en Bruselas hay cervezas para todos los gustos.
Saliendo de la grand place se encuentra otro de los símbolos de Bruselas: el Manneken-Pis. Entre las calles L’Etuve y Chene está esta estatuilla de 50 centímetros con muchas leyendas a su alrededor. Durante el año el ayuntamiento disfraza al Manneken-Pis en alguna ocasión y si tenéis curiosidad por ver alguno de los 650 trajes que los presidentes del gobierno le han regalado a esta figura en sus visitas a Bruselas, en el Musée de la Ville podéis hacerlo.
A unos 10 minutos del Manneken-Pis se encuentra la Place D´Espagne, donde te sentirás como en casa ya que nada más llegar os encontraréis de frente una curiosa estatua de Don Quijote y Sancho Panza. La Plaza de España no tiene mucho más, pero siempre hace ilusión ver que se acuerdan de nosotros en otros países por lo que si en vuestra visita tenéis unos minutos, no dudéis en pasaros por este trocito español en Bruselas.
El recorrido sigue y la siguiente parada es la Catedral de Bruselas. Cerca de la estación central, la Catedral de San Miguel y Santa Gúdula es un edificio gótico cuya construcción terminó en 1500. La entrada es gratuita excepto al Tesoro de la Catedral que cuesta 1 euro y a la Cripta que son 2,50.
PARA COMER
Dando un paseo para hacer hambre llegaréis a un lugar tiene fama de servir las mejores patatas fritas de Bélgica. Maison Antoine es uno de los fritkots (o puestos de patatas fritas) que se extienden por la ciudad, una opción muy barata para comer algo típico belga.
En Bruselas las patatas se sirven en cucuruchos o bandejas y se comen acompañadas de una buena salsa. Mayonesa, mamouth, Brasil…y un sinfín de salsas a elegir para acompañar vuestras patatas.
Si no queréis perder mucho tiempo en comer para que os de tiempo a seguir recorriendo la ciudad estos puestos son la mejor solución para cargar pilas y ver la ciudad casi al completo. Si no os convence la idea, por la zona siempre encontraréis restaurantes típicos donde comer un buen plato de Moules Frites, mejillones con patatas, Hutsepot, un guiso de verduras y carne o cualquier otro plato belga.
Y de postre no podéis dejar de probar alguno de los bombones o chocolates tan típicos de Bruselas. Como consejo os chivamos que los de la marca Godiva están muy ricos.
POR LA TARDE
A unos 10 minutos de Maison Antoine se encuentra el Parque del Cincuentenario. Tras haber descansado y repuesto fuerzas con la comida, el viaje continúa por el segundo parque más importante de Bruselas. En él se encuentra el Palacio del Cincuentenario cuya parte más característica es el Arco del Triunfo. El Palacio acoge en su interior el Museo de Historia Militar, el Museo del Cincuentenario y la exposición de coches Autoworld, por si además de verlo queréis empaparos de su cultura.
Cerca se encuentra un lugar lleno de encanto en el que os recomendamos parar a tomar un café o merendar en alguna de sus cafeterías algún gofre, crêpe, o dulce típico.
La Place du Grand Sablon reúne numerosos edificios de los siglos XVI a XIX y es considerada un conjunto arquitectónico maravilloso en el barrio de Sablón. Los sábados de 9 a 17 y los domingos de 9 a 13 se instala además un mercado de antigüedades y libros muy visitado por turistas. La plaza cuenta además con diversas tiendas de antigüedades de alta clase, restaurantes de comida típica o tiendas de chocolates y la maravillosa iglesia gótica Notre Dame du Sablón.
Un poco más lejos se encuentra el famoso Atomium. Para llegar podéis coger allí mismo la línea 6 de metro desde Porte de Namur a Heysel y en unos 40 minutos llegaréis al monumento más emblemático de Bruselas. Construido para la Exposición Universal de Bruselas de 1958, el Atomium representa un átomo de hierro ampliado 165.000 millones de veces. En el interior suele haber exposiciones permanentes y temporales aunque con las colas que se forman no merece la pena esperar. A escasos metros está el parque Mini Europe, un espacio inaugurado en 1989 que representa 80 ciudades de la Unión Europea a través de 350 maquetas a escala 1/25. Este puede ser el cierre perfecto para un día de turismo puro y duro. En esta página podéis ampliar información sobre horarios y precios por si os animáis a conocer Europa en miniatura.
POR LA NOCHE
En Bruselas la noche empieza y acaba muy pronto así que podéis aprovechar para cenar algo por la zona de la Grand Place y tomaros las primeras copas o cervezas en algún bar para probar alguna de las 600 variedades de cerveza con las que cuenta Bruselas y así ir calentando motores. Los barrios con más fiesta de la capital belga son Bourse, con gran oferta de música en directo; Saint Géry, para los que buscan la fiesta más tranquila; Loise, para una noche divertida y con estilo; Sainte Catherine, con espectáculos de estilo “freakshow” y Saint Gilles, para vivir una noche diferente con gente muy interesante en bares típicos de la ciudad.
En cuanto a discotecas, en vuestra salida por la noche bruselense no puede faltar vuestra visita a Le Fuse, Le You o Havana Club. La primera es perfecta para los amantes de la música electrónica, ya que es el mayor local dedicado a este estilo de música en toda Europa y ¡el local de mayor prestigio en Bruselas! Le You ofrece noches temáticas dedicadas a un género musical en concreto por lo que le gusta a todo el mundo y Havana Club es un local multicultural en el centro de la capital que cuenta con dos pistas de baile, varias barras para evitar aglomeraciones y ¡música en vivo! Además cuenta también con una carta para todos los gustos en la que destacan las tapas por lo que es el sitio perfecto para empalmar las cervezas de la tarde con las copas de la noche.
Si sois fiesteros por naturaleza y os apetece salir a darlo todo, en viajeronomada.com os cuentan más sobre discotecas, bares, pubs y todo lo que necesitáis saber para pasar una noche increíble en la fiesta bruselense.
Imprescindibles
Ruta por las fachadas del cómic
Si sois fan de los comics o no os gusta conocer las ciudades de forma convencional, os proponemos una ruta alternativa para descubrir Bruselas a través de su arte mural. Recorriendo los barrios bruselenses a través de 50 frescos originales en sus paredes, conoceréis cada rincón de la ciudad siguiendo la ruta de fachadas pintadas de cómic. Sin duda esta es la manera más colorida y alegre de conocer la capital belga.
Brussels Comic Strip Festival
También en septiembre el cómic tiene su propio festival en la capital belga. Exposiciones, conferencias, animaciones…harán que los apasionados del cómic disfruten de un festival ¡exclusivo para el cómic!
Si os apetece hacer un viaje y no sabéis donde ¡Bruselas es vuestro destino!.